miércoles, 29 de junio de 2011

La banda sonora de tu vida (o alimento para el alma)

Intento, cronológicamente, explicitar la banda sonora de mi vida...

De bebé la nana del gallito que se perdió

Después de bebé y en la primera infancia las canciones que le gustaban a mi madre de un disco que se llamaba 25 años de éxito: Mi limón, mi limonero...Blanca y radiante va la novia, Without you de Nilson y otras muchas que con los años de mayor me di cuenta que me sabía de memoria, aún en inglés.



Con 5 años Marco



Con 6 años Heidi



Con 7 años Alabaré a mi señor



Con 8 David el gnomo y silbando verano azul todo el idem.



Con 10 Mocedades (Solo fui tu secretaria, me daba tanta pena...) porque le gustaba a mi madre

Y Manolo Escobar que le gustaba a mi padre



Con 11 más o menos Made in Spain cantándola en la calle mientras la Década prodigiosa la cantaba en Eurovisión mientras nosotros NO la estabamos viendo.



Grabar en la grabadora del casette: Les crismas ai geivyu mai jart but de veri nest dei yu geivit aguay...una y otra vez...porque me encantaba y no sabía de quien era la canción...



Con 12 El final de la cuenta atrás, de Europe. Qué rico pa comer me parecía Joey Tempest. Ahora un perroflauta de piel nacarada cualquiera!! Una cinta vieja que me regaló una prima ya ¡adolescente! y un poster con las marcas de las anteriores grapas y celos. Primeros afiches de adolescente. Recuerdo mi cuarto azul compartido con mi hermana. Cuando me monté vestida de novia en el coche que me llevaba a la iglesia sonaba también esta canción...siempre me pareció que me la pusieron a posta. Lo niegan...



Con 14 Modern Talking, que ya no estaban de moda pero me molaban. Brother Loui me recuerda a un viaje en autobús a Andorra.



En la puerta del sol como el año que fue de Mecano...fue número 1 de los 40 principales en junio de 1989 cuando estábamos de viaje de curso de 8º. El mismo viaje en el que por no sé quien escuchamos Los Calis cientos (no exagero) pero cientos de veces "Ayudenos ¡mi cuchara está impregnada de heroína! Tenía casi los 14.



El sitio de Zaragoza, en rondalla cuando al cambiar de pueblo a la terrible edad de 14 años, me metí en ese grupo para conocer gente de mi edad. España Cañi. Clavelitos.



Marta tiene un marcapasos. Mis compañeros la cantaban todo el rato, la odié, y eso que Hombres G me encantaron durante un tiempo ¡no soy perfecta!



El 7 de septiembre de Mecano. Tenía 15 años y me parecía taaaaaaan bonita. Y yo era taaaaaan adolescente...



Shinny Happy People. Losing my Religion. R.E.M mi adolescencia pura y dura. La sidrería, inolvidable antro lleno de mierda, punto de encuentro imprescindible, y su máquina de poner ¡videos musicales! el más repetido Believe de Cher. No puedo escucharlo sin trasladarme a esos años.



Espiral. Mis primeras discotecas, los ojos cerrados, tratando de retener ese momento de juventud, eterna, para siempre. Lo conseguí. El recuerdo, no la juventud. Luego hicieron un remake que se llama Infinity 2008. No está mal, me sirve para recordar. Y el chiquitaunchiquititantantan quetumbaban quetumbanquetequete de Chimo Bayo. Esta me la aprendí sin querer, pero me ralló bastante el Esta sí, esta no....



Enya, vacaciones y una cinta olvidada en un hotel en Benidorm...una pena, aún me acuerdo.



Queen...Fredy se moría, y The Show must go on me levantaba la piel a tiras. Descubrí tantas canciones de Queen que me gustaban y no sabía que eran suyas...imperdonable, pero siempre unidos, estábamos predestinados. Como con el santo, otro Cuinero. Queen nunca falla entre nosotros. Siempre es bien recibido.



U2 With or without you del final de mi adolescencia. U2 me parecía (y me parecen algunas canciones) música del universo. Es aquella que flota en el universo a la espera de que algún "músico-compositor" la cace al vuelo y la transforme para el oido y disfrute del resto de los mortales. Es música que siempre ha estado ahí...lo notas, no puede ser de otra manera. Es como la novena de Bethoven. Yo las tenía a la misma altura antes de que un estudio de hace pocos años dijera que tenían los mismos parámetros de calidad. No sé que parametros son esos, pero a mí me suben la patata en el cielo!!


Rosana. La odio a muerte a la pobre, y no es culpa suya (aunque su cadencia me irrite indescriptiblemente). De la época en la que yo hacía de promotora tocapelotas ¿quiere probar un pincho de cepillos de raices? Están buenísimos y de oferta. Rosana se hizo famosa, y le debió gustar al que ponía la música en el centro comercial. Juro por lo más sagrado que escuchamos a Rosana Cara A y Cara B horas y horas y horas y horas y horas....y más horas seguidas, sin descanso, sin piedad. La aborrecí.



When a man loves a woman pasó por nuestra canción mucho tiempo, aunque su letra no nos gustaba nada. Más tarde por común acuerdo nos quedamos con Sin miedo a nada, de Alex Ubago y Amaia Montero.



No more lonely nights de Paul McCartney...definía tan bien las ganas que teníamos de vivir juntos y no pasar ni una sola noche más separados...La pusimos en nuestro video de bodas. Me importa un bledo si queda hortera.


El año que decidimos casarnos fue el de A dios le pido que si me muero sea de amor y si me enamoro sea de vos..., y aquella de Shakira que hablaba de lavarle los pantalones a no sé quien...¡me parecía una señal horrorosa en el año de nuestra boda!



El universo sobre mí, de Amaral cuando fui madre de la nena. La primera vez. Aún la canción no estaba compuesta, pero su título fue para mí al recordar a la nena recién nacida, sobre mí. No había nada más.



Halo, de Beyoncé. A veces las canciones vienen a poner música a algo que estás viviendo y que no imaginas que podía sonar así. Halo es para el santo. A él no le gusta mucho, y menos después de que yo la haya escuchado dos millones de veces. Pero a mí sí, porque lo siento así.



Alguna me dejo en el tintero, seguro...pero esto ya es demasiado largo...



Esto no se queda aquí...y de esto hago un meme-musical, y nomino para que lo contesten cuando buenamente puedan y quieran desperezar su memoria también a:

Uma
Pseudosocióloga
Pilar
Bet (especialista en estas lides)
Mariluz
O.C
Elly

No pringo a nadie más...si aceptáis el reto, seguro extenderéis la semilla del recuerdo entre los demás...

Y esta es la receta de hoy...música o alimento para el alma.

jueves, 23 de junio de 2011

Con un par...de huevos (o el machote y el pastel de cangrejo, huevos y salmón)

Si no lo cuento, reviento. Y lo voy a contar como lo sentí, palabrotas incluidas. Por si alguien sensible, decide no seguir leyendo.

Ya sé que este blog es rosa, y lleno de corazones, y tiene la palabra Amor en su título. Pero a veces me sale la vena cerril y verdulera ¡a ver si alguien se iba a pensar que llevo bragas de algodón de azúcar!

Como ya comenté en post anteriores, y no es broma, y por sobradas razones que ya conté aquí, decidí cumplir semanal, y religiosamente con la ONLAE. Y en esas andaba yo ayer, con los euromillones y la primitiva con mis niñas alrededor. Yo hurgaba mi monedero buscando los boletos anteriores para comprobar, y el dinero, mientras la señora de la cola que iba detrás de mí le decía cosas a LA bebé, que no es por nada, y ya sé que si yo lo digo no vale, todo el mundo dice que es un guapisísísísma. Pues eso, que la decía: ¡qué ojazos! ¡hay que ver que bonito eres! ¿o eres bonita?

Yo le había puesto un vestidito azul de algodón, que por los cinturones del carrito, no se notaba vestido, sino todo arrebujado e indistinguible como un mono o pelele.

Yo seguía hurgando concentrada y sonriendo por la amabilidad, esperando se diera cuenta del minúsculo- pero repetido y además simétricamente-detalle de los pendientes. Que vale que piercings se pone cualquiera, pero aún no he visto ningún bebé niño con ellos. No la comentaba nada aún, pues la lotera impaciente con la cola, me apremiaba con cara de sillón de orejas.

Así que la señora remató su discurso a La bebé diciendo:

-Tienes que ser un niño....¡Tienes cara de machote!

UUUUYYYYY ¡¡¡lo que me ha dicho!!!

Si me meten una escoba por el ano-culo en castellano-en ese momento no me pongo más tiesa, ni la miro más fijo, pese a la mirada ametralladora en mi cogote de la lotera a la que ignoré por completo a partir de ese momento.

-Pues no, es una niña-le dije
-Uy, perdona, me había parecido un machote
-Lleva pendientes-le dije lo más sonriente que pude-y mordiéndome la lengua para no decirle: sí, sí, tan machote que le hemos puesto los pendientes en los huevos, y como los tiene tan grandes, se le suben hasta arriba, ahí, a la altura de las orejas ¡no te fastidia!

Y también me quedé con ganas de añadirle la frase favorita de mi madre en estos casos:
-Que dios te conserve las orejas
-¿las orejas? ¿y eso?
-Pues para sujetarte las gafas, que falta te hacen...

La verdad es que la pobre mujer no sabía donde meterse. La cara de su essssposo era todo un poema, la típica de desear salir de ahí para descojonarse abiertamente y contárselo a todo perro quisque.

Y como de huevos iba la cosa, sobre todo cocidos son muy socorridos para muchos platos; como la vuelta al trabajo no ha sido del todo en balde, mis compañeras me iluminan con nuevas ideas y platos ricos que para hoy, llevan huevos ¡como no! En este caso es un Pastel de Salmón. 

El que sigue es un pastel facilísimo de hacer. Un poco pesado e ideal para días de visita, pues si no cualquier cantidad por pequeña que sea, es mucha.

Necesitaremos pan de molde sin corteza, 2 huevos cocidos, 10 palitos de cangrejo, una cebolleta mediana, un sobre de salmón ahumado (unos 200 gr.) y mayonesa. Se le puede poner huevo hilado por encima.

Picamos muy finito (en picadora si se tiene, mejor) la cebolla, el huevo duro y los palitos de cangrejo y lo mezclamos con la mayonesa. En una fuente ponemos una base de pan de molde, por ejemplo un cuadrado de 4 lonchas. Extendemos el relleno por encima, y ponemos otra capa de pan de molde, otra vez relleno, otra vez pan y terminamos poniendo el salmón ahumado por encima.


Es un plato muy rico, que llena muchísimo y que se puede dejar perfectamente preparado para otro día. Con el corte en triángulo de un sandwich (recordad que son varias capas) y un poco de ensaladita verde, uno queda bien satisfecho. Os dejo foto para que veáis la presentación, que es muy aparente. Eso sí, calórico...un ratito si es. En la medida que abusemos de la mayonesa, claro. Se rumorea por ahí que se puede hacer una mayonesa de leche sustituyendo al aceite que da el pego. Todo será cuestión de probar...

¡Que os guste! Besos

miércoles, 15 de junio de 2011

Mi cumple y la feria del libro.

En esta semana es mi cumpleaños. Soy una géminis loca. Para nada tengo doble personalidad, pero sí puedo pensar en blanco y su contrario y comprender perfectamente ambos puntos de vista. Supongo que esa es la tan famosa dualidad del géminis.

El sábado, junto con un millón de personas más o menos que tuvieron la misma idea, fuimos a la Feria del Libro de Madrid en su penúltimo día. Me encanta y la odio a la vez. La odio porque casi nunca puedo ir en un día tranquilo, sino cuando vamos todo el mundo, con lo cual acercarse a algún puesto es difícil. Me encanta porque es una gran librería. La odio cuando muchos libros se repiten una y otra vez de un puesto a otro. Me encanta poder aprovechar para comprar un montón de libracos pendientes con el 10% de descuento, que no es mucho, pero ayuda. Me gusta cuando encuentras puestos especializados: todo infantil, o todo Scooby Doo, o universitario, u opositor, o verde, o de salud, o religioso, o gay y todos con sus dependientes a juego, claro. 

Me encanta que haya escritores firmando. Odio que haya escritores obligados a firmar para vender. Me encantaría que esa firma fuera la oportunidad de poder decirle a ese autor lo que sus libros significan para mí, lo que me han hecho sentir, o volar, o pensar. Me encanta tener libros firmados por mis autores favoritos, pero odio hacer cola y en el fondo fondo, me da absolutamente igual dicha firma. Al fin y al cabo el verdadero autor o autora está dentro del libro en sí, y no en la firma y dedicatoria, que automática, y haciendo un sobreesfuerzo de originalidad, han puesto por obligación en las primeras páginas.

Me encanta cuando los autores firman toda su obra, y tú te llevas varios libros de él o ella, alguno firmado. Odio cuando SÓLO firman el último libro, porque se están vendiendo a gente que sólo colecciona firmas. Vamos a ver, si a mí me encanta Almudena Grandes, tengo su último libro comprado o lo regalado un día antes de que salga. Por lo tanto, cuando lo firma en la Feria yo no voy a hacer la soberana gilipollez de hacer cola para que me firme un segundo ejemplar. Cuando un autor firma toda su obra tienes unos segundos más. Me explico. Que no necesito la firma, que necesito decirle algo, devolverle algo de lo que me dieron. Pero eso ha de ser rápido, y concentrado como una pastilla de caldo, que tampoco es plan de ser una plasta y hacer doble la cola. Así que te tiras un buen rato pensando qué vas a decir. Y si es un libro, pues algo cortito, claro que si son varios porque firma obra...pues a lo mejor le da para escucharte un poco más...

Me encanta que firmen escritores consagrados y odio que firmen tuercebotas que escribieron un libro a propósito de su fama en cualquier otro ámbito, y ya de paso vendo unas docenas (como los que le ponen el nombre a un perfume, igual) Me dan mucha angustia los escritores noveles o poco conocidos, y mucha vergüenza ajena las colas inmensas para escritores famosos (que no buenos) y la mirada de los autores sin una mala firma que llevarse a la boca, que no miran a la gente para que no se les note que se sienten solos y humillados ante las colas de Bob Esponja, Octavio Acebes o María San Gil, todos como sabemos, escritores consagrados y de larga pluma.

Escuché por megafonía que Javier Marías, mi primera lectura del domingo, firmaba. Ni encontré la caseta 349 ni más ganas de buscarla, con la de gente que éramos allí el sábado a última hora. Eso sí, me queda pendiente comprar su libro que ya me recomendaron. Encontré por casualidad que Juan José Millás firmaba su obra y no me pude resistir . Aunque le tengo poco explotado, lo estoy añadiendo poco a poco sin duda a mis escritores favoritos. Comencé hace muchos años con El desorden de tu nombre que me recomendó mi hermana entonces adolescentísima y hace relativamente poco leí El Mundo sin duda uno de los Premios planeta de más calidad y que más me ha gustado de dichos premios (jamás compro un premio planeta)

Firmaba toda su obra, así que escogí uno de relatos Los objetos nos llaman, y quedándome con ganas de comprar muchos más, aunque ya estaba casi agotado nuestro presupuesto ferial. No sólo no me está defraudando, sino todo lo contrario. Relatos cortos y de gran calidad, que me están sirviendo para todo. Llenos de humor, verdades absolutas, relativas, experiencias y anécdotas, reales o inventadas lo mismo da, deliciosos y adictivos...le he nombrado ya definitivamente otro de mis autores favoritos y releibles (releo tanto como leo, y como dijo aquel autor que no recuerdo quien..."Yo no aspiro a que me lean, pero sí a que me relean". Así que ya estoy pensando en los siguientes libros suyos que voy a comprar, empezando por el último Lo que sé de los hombrecillos

Me encanta encontrar al final la frase corta y oportuna que refleje mi admiración por ese autor o autora, en esos escasos 20 segundos mientras te firman. A Juan José Millás le dije simplemente que me encantaba "la foto" su sección de EPS. Sonrió avergonzado y con la boca muy pequeñita me dio las "muchas gracias". Odio (o no me gusta) ver la grandeza de sus obras invisible bajo esa avergonzada actitud de "¿es cierto? ¿de verdad que quiere usted que le firme algo?" gente sencilla que no puede creer ni encajar los halagos de sus lectores admiradores.

¿Qué esperaba? Al fin y al cabo, supongo, lo mejor que tiene un buen escritor, es lo que ha volcado en sus novelas...

Estoy ansiosa porque llegue mi cumpleaños, y recibir todos aquellos libros que descaradamente he pedido en mi entorno para asegurarme regalos que me gusten.

¡Abrazos!

viernes, 10 de junio de 2011

El fin del idilio

Esta entrada fue programada. Para cuando sea publicada:

-Estaré conduciendo por primera vez después de más de 6 meses, de nuevo hacia el trabajo.

-Volveré a escuchar en el coche 15 minutos del ¡Anda Ya1 en los 40 principales (eso si continúa, porque hace más de 6 meses que no lo escucho)

-Probablemente escucharé la misma cuña, en la misma curva, en el mismo minuto cada día justo antes de salir a la antepenúltima glorieta del trayecto (y que tanta grima me dan esas repeticiones día-tras-día)

-Aparcaré en el mismo sitio en el que he aparcado los últimos años.

-Estaré angustiada por la separación de mi bebé.

-Estaré emocionada por encontrarme con mis compañeras de nuevo que me volverán loca contándome cosas y preguntándome por las niñas, y a las que enloqueceré con mis babas hasta arrepentirse de haberme preguntado.

-Estaré pensando tres cuartos de hora la puta contraseña de la intranet y que justo tuve que cambiar antes de irme, por lo que al ser nueva, por supuesto, no recordaré.

-Estaré atemorizada por mi bandeja de entrada de e-mails del trabajo.

-Estaré más perdida que un pulpo en un bidé hasta que me centre y vuelva a tomar las riendas de mi puesto.

-Se me arrugará el corazón y el estómago cuando una mamá pasee a su bebé en su carrito por delante de la cristalera de mi trabajo.

-Estaré mirando el reloj 250 veces a la hora.

-Trataré de sumergirme lo antes posible en el trabajo, sólo con el fin de que se me acabe pronto la mañana.

-Estaré intentando contenerme 249 veces de llamar a mi madre para preguntarle qué hace mi niña, que dice mi niña, si se mueve mi niña, si come mi niña, si juega mi niña y si se ríe mi niña.

-Conseguiré llamarla sólo una vez y ella me dirá sonriente por teléfono que está fenomenal, y que no me echa nada de menos, tal y como me decía de la nena, para no angustiarme. Y casi seguro, será verdad.

-Me arrepentiré cuando me suba la leche a media mañana, de no haberle sustituido la teta por bibi con más tiempo la toma del medio día para hacerme el cuerpo.

-No me arrepentiré de lo anterior, porque la teta es ya un vicio para ambas.

-Envidiaré a mi madre, por disfrutarla toda.

-Me alegraré infinito de que mi niña sea disfrutada toda por mi madre.

-La llamaré una segunda vez para recordarla que no deje de achucharla.

-Recordaré estos casi 5 meses de idilio mañanero con mi bebé, lo cortos que han sido, para lo largos que fueron los del embarazo cuando la soñabamos y tardaba tanto.

-Añoraré la hora a la que recogería a la nena del cole, que por ser viernes, saco antes del comedor para irnos caminando las tres a casa con cuerpo de viernes.

-Desearé irracional y egoistamente que la bebé tenga ya 3 años para sentirme menos mal por trabajar.

-Pensaré en aumentar mi contribución mensual a la ONLAE.

-Ansiaré pasen rápido unas semanas, para estar ya acostumbradas a la nueva rutina.
-Me regañaré, por desagradecida, ya que otros no tienen trabajo.

-Me consolaré porque sólo estaré 5 horas y media separada de ella que me necesita tanto (o yo a ella....)

-Me alegraré de trabajar porque me gusta, aunque preferiría no hacerlo sus 3 primeros años. Los de ninguna de las dos.

-Lo llevaré mejor que cuando la nena, pero sólo porque ya sé lo que se siente.

-Pero me sentiré de puta pena, como con la nena.

Pido perdón por este llori-post a las mamás y papás que desearían salir a trabajar, y no pueden. Y a las mamás y papás que trabajan a turno completo, o en horarios partidos y leoninos y que les impiden llegar a casa, cuando ellos y ellas quisieran llegar a casa.
Es sólo que hoy...no tengo consuelo...

Hoy de comida, lentejas que además vienen al pelo por el recuerdo del post al respecto. Lentejas de mi madre, claro. Hay que aprovechar la coyuntura, y no es plan de dejar de comerlas como dios manda (y no como yo las hago...)

lunes, 6 de junio de 2011

Pá pepino ¡el español!

Los Hamburgueses (más concretamente la hamburguesa responsable de sanidad) osaron apuntarnos con el dedo. Lícito es. Pero alzar la voz sin pruebas ¡¡vamos, vamos!!

Y como hoy es el día del blogopepino, yo, que no conozco más receta de pepino que la del gazpacho, y esa la sabe cualquiera (la pongo por si acaso,  ya que en un post que nombré "paella" sin poner receta...es el que más visitas tiene)

Pues eso, que pongo mi receta de gazpacho, y luego pondré la del pepino que más gustaba a mi padre, y por extensión e imitación a mí: pepino con sal y aceite de oliva virgen extra.

Gazpacho abulense-madrileño (el mío)

-1 kg de tomates maduros. De bote enteros y pelados estupendo también
-1/2 cebolla (si la pongo entera, a nosotros nos repite mucho)
-1 PEPINO ESPAÑOL de cualquier huerta española. No hace falta pedirlos sin E-Coli, porque todos salen sin ella por defecto.
-1 diente de ajo (abrirle a lo largo y quitarle el brote verde del centro, para que no repita tampoco)
-Un currusco de pan duro mojado
-Agua fría
-Aceite de oliva, vinagre, sal y Cominos. Adoro encontrarme los cominos y masticarlos...¡hummmmmm! el santo los odia, así que no hay gazpacho feliz

Como decía Carmen Maura en Mujeres al borde de un ataque de nervios, el secreto está en como mezclarlo. Yo lo corto todo (excepto el tomate y el pan) y lo aliño con el aceite, vinagre y la sal, y lo dejo reposar un poco. Después añado el tomate, el pan y el agua mientras le meto la batidora a todo. Por último los cominos para encontrármelos enteros.

¡Y ya está! Yo creo que esto ya lo he contado antes....

Bueno, pues pongo ya nuestro pepino casero: Se lava y se pela el pepino (tal y como se hace siempre en España)  Mi padre siempre le dejaba una veta de piel verde, porque decía que así no le daba cólico, ya que decía que el pepino puede ser un poco indigesto. Se corta a lo largo en 4 trozos que aliñaremos con un poquito de sal y un poquito de aceite de oliva virgen extra. Fresco y fácil ¡y como engancha!

¡Viva el pepino españó!

viernes, 3 de junio de 2011

¡Qué fuerte!

He visto mi entrada del día 29 de marzo. Es decir, que hace dos meses que estoy con Crimen y Castigo.

Sin comentarios

(Definitivamente, Fédor es la leche, porque vengo a leerme 4 páginas cada noche antes de caer muerta, y siempre siempre siempre consigue que me meta en él hasta sentir la respiración de Raskolnikov)

No merecen tampoco comentarios que aún no haya leido el periódico del domingo, y sólo lleve tres páginas de EPS.

De pena

Eso sí...lo que hago el resto del día ¡me encanta!

Ayer, y para que no se me olvide, la nena tiró agua en el baño, y vino muy dispuesta a por la fregona. Al grito de ¡no, espera, yo te la preparo! dijo muy segura: ¡No te preocupes mamá, ya la he "rebañado" bien!

¡Abrazos!

Pd. La foto son las manos escaneadas de la nena cuando tenía 4 años....esas largas tardes de invierno....